ciencia ficción

Platicando con Ducel me acordé que me gusta la ciencia ficción y he escrito un par de cuentos así. Este es uno más de un género subvalorado (opiniones por favor):


LA BASE
Durante mi infancia tuve pocas oportunidades de salir a la superficie, siempre era muy emocionante aunque realmente no había mucho que ver. Las primeras veces que salí eran expediciones cortas con mi padre, usábamos trajes especiales que nos cubrían completamente para protegernos del clima y del ambiente contaminado. Expediciones rutinarias con la finalidad de revisar y calibrar periódicamente los instrumentos y medidores. Toda mi vida he habitado en la base, así como mi padre y mi abuelo, no conozco nada más que estas instalaciones subterráneas y la nieve sobre nosotros.

Hubo una ocasión en que encontramos los medidores descompuestos, y muchas huellas que desaparecían en el horizonte. Huellas como las nuestras. Nunca en toda mi vida hubo contacto con humanos de la superficie. Mi padre habló con los ancianos y les exhorto a prepararse para cazar a los extraños. En ese momento no lo escucharon. Semanas después, cuando tuvimos los materiales para hacer las reparaciones, encontramos un incendio, nunca antes había visto fuego en un estado tan primitivo. Los hostiles dejaron una nota, exigían comida, les dejamos algo y hubo un documento pidiéndoles que siguieran su camino.

Los hostiles no se fueron y acamparon cerca de la base, mi padre estaba muy molesto porque entorpecían las investigaciones, habían trabajado por años para encontrar la manera de purificar la tierra y poder sembrar plantas de nuevo en la superficie. Estos humanos parecían haberse vuelto inmunes a la radiación, tenían una manada de lobos con ellos y por las noches nadie salía a la superficie, parecía que todos los ojos que nos observaban eran de bestias, muchos puntos brillantes, dicen que así se veían las estrellas en el cielo. La situación había llegado a su clímax cuando le dispararon a un compañero de mi padre, no había necesidad, incluso les habíamos aumentado la dosis de comida y les dimos algunas medicinas. Teníamos que deshacernos de ellos pero había pocas personas en edad y condiciones para pelear, no contábamos con mucho armamento tampoco. Mi padre buscó una solución, nosotros contábamos con un par de osos polares que fueron encontrados desde muy pequeños, fue en verdadero hallazgo y los habíamos criado desde entonces, pero no parecía haber otra solución, tendríamos que usarlos para pelear.

Mi padre junto con otros tres hombres llevó a los osos a una salida poco usada que los ubicaría de espaldas al campamento enemigo. Se despidió de mí recordándome que si algo llegara a pasarle yo debería de seguir sus investigaciones y ocupar su lugar dentro de nuestra sociedad. Vi lo que pude a través de unas viejas cámaras de seguridad. Fue una masacre, los lobos derribaron a los viejos osos, las municiones eran muy pocas, todos cayeron menos mi padre, lo usarían como rehén. Lo golpearon y humillaron, sin embargo sonreía. La explosión que provocó fue tan enorme que incluso llegó a cimbrar nuestros edificios. No quedaron restos de nada, ni siquiera huesos, todo lo que permaneció fue una delgada capa de ceniza blanca, como sal, sobre la nieve. Nunca volvimos a tener noticias de otros humanos en la superficie.

A veces tienes que hacer las cosas mal para aprender, otras veces nunca tendrás oportunidad alguna. Mucho tiempo ha pasado desde la muerte de mi padre, aún hoy no lo entiendo, ¿por qué dar su vida por un futuro incierto más allá de su existencia o la mía? La población de la base ha mermado debido a una epidemia, sólo quedamos unos pocos y no se cuanto tiempo podamos seguir, yo soy el más viejo de todos. ¿De qué sirvió tu muerte padre? ¿De qué sirvió construir esta fortaleza subterránea y almacenar todas las diferentes semillas conocidas? ¿Qué trascendencia tendrá mi vida? En estos días en los que me preparo para morir una idea me ataca frecuentemente, tal vez el mundo nunca será habitable de nuevo, ya nada importa.